15. Frases
Yo no sé si te das cuenta, pero a veces me hacen daño tus cartas. Antes era distinto… pero ahora sé que estás ahí y que piensas en mí. Ahora sé que de vez en cuando voy a encontrar una de tus cartas en mi bandeja de entrada y algo tan pequeño hace una diferencia abismal.
No sabés cuantas veces me he imaginado tu regreso. Me doy manija como una boba y me invento un rollo desenfrenado. Pobre ilusa, después me cuesta regresar a la realidad. Convencerme de que lo que hubo entre nosotros, es algo… no sé, buscá vos el adjetivo que para eso siempre fuiste más ducho.
Cuando tu hermano murió pensé que sería el final de tu exilio. La carta del Héctor te exoneraba y a lo mejor eso fue lo único que él pretendía con su muerte. Librar al hermano prófugo, al desaparecido que a fuerza de ausencia truncó tantas vidas…
¿Por qué te fuiste? ¿Por qué me dejaste rodeada de tanto campo y tanto silencio? Y ahora siento el mismo miedo de hace tantos años. Solo que ahora no puedo explicarlo.
Me quedé con una frase de tu última carta… ¿Cuánto de esto es cierto?
Tenés razón, Joaquín.
Yo tengo el honor de conocerlo caballero, vaya letra, vaya colega del amor, es usted un arte de vida.
Felicidades, vaya pagina esta, tanto tiempo sin leer y sin noticias de estas cosas magicas que nos isnpiran a volar en esa burbuja de ganas y poder.
Felicidades. Quiero un libro, lo compro mañana.
Gracias por leer. En cuanto al libro, ya circula una pequeña antología de relatos “Cuentos de amor, de locura y de olvido” como edición digital: http://www.amazon.com/dp/B0045Y25Z0